Nos alojamos en uno de los apartamentos y la verdad es que el entorno es espectacular,el apartamento muy nuevo con todo el equipamiento necesario y nos gusto mucho sobre todo porque viajamos con nuestra mascota y está bastante cerca de San Sebastián, En ese sentido pongo buena nota.
Pero también tengo que decir que nos fuimos con mal sabor de boca.
Primero porque aunque estábamos en los apartamentos y no nos correspondía poder desayunar en el complejo donde están las habitaciones nos ofrecieron el desayuno incluido en el precio por reservar directamente con ellos y no con booking que es como acostumbramos a hacer; pues bien desde el primer día patxi nos dejó claro que había sido algo muy excepcional y nos hizo sentirnos mal y un poco incómodos, al siguiente día la misma historia del desayuno y culminó el último día cuando nos dijeron que si queríamos desayunar allí teníamos que pagarlo ( en ningún sitio en el que nos hemos alojado antes nos ha pasado eso!) Si tienes el desayuno incluido es todos los días o yo al menos lo entiendo así. El caso es que no dijimos nada y no discutimos por un mísero desayuno pero ahora lo cuento aquí igual que digo lo bueno digo lo malo.
El desayuno estaba muy bueno pero he de decir que si estás allí una semana se hace muy repetitivo.
La atención de patxi mujer e hijas fue buena en cuanto a recomendaciones de lugares donde comer y rutas. Muy amables siempre, gracias.
Y otro aspecto negativo a comentar fue nuestra experiencia con los masajes, mucho cuidado con los masajes, os cuento:
Nos dio un masaje a mi mujer y a mi “Mikel” un masajista-osteopata que trabaja con ellos, pues bien el masaje relajante que contratamos inicialmente fue de una hora en la que te psicoanaliza y se mete mucho en tu vida sin conocerte de nada mientras que debería estar más concentrado en dar el masaje, en mi caso me dijo que no me guardara las cosas para mi y que me enfadara y gritara de vez en cuando porque guardarme los sentimientos me estaba provocando tensiones musculares y por eso mismo me decidí a poner esta opinión. Después me convencio para hacerme un tratamiento con ventosas para quitarme contracturas y bueno pues ese fue mi error, allí me dejó 30 minutos sólo en la camilla con las ventosas En la espalda mientras el se subió a tomarse un café.
En fin mi consejo es que si se van a dar un masaje sea un masaje, menos charla y más masaje, pero vamos es una opinión.
No obstante me quedo con lo bueno, es una tierra maravillosa y la gente con la que nos hemos topado ha sido muy amable con nosotros, muy recomendable. Un saludo