Es un hotel pequeño, con habitaciones muy acogedoras. Lo que me sorprendió gratamente es que las habitaciones tienen las sábanas más limpias, suaves y acogedoras en las que he dormido. He estado en hoteles de 5 estrellas y la verdad las camas y las almohadas no le piden nada a esos lugares.
Lo que me gusto mucho es que tienen un reglamento bastante severo en contra de fumar dentro del hotel o en el comedor a pesar que es al aire libre.
La comida en el restaurante es bastante tardada, el motivo de mi visita era por una boda a la que asistí y el hotel estaba lleno tal vez por eso eran tan tardados. A las 11 a.m. ya no tenían casi nada en el menú. Un amigo quería imprimir un pase de abordar y tras 30 minutos de espera no lo pudieron resolver. También me percate que un señor llevaba 40 minutos esperando su habitación. El check in era a las 3 y el señor necesitaba entrar a su habitación para arreglarse e ir a otra boda y casi daban las 4 y no le daban su habitación.
Es muy engorroso el check in.

La finca esta muy limpia la atención es excelente, cuenta con estacionamiento, alberca, bar, y un pequeño restaurante, hace falta modificar la temperatura de la alberca , menos fría ya que los huéspedes no la usan por esa situación y es un desperdicio , sugiero una máquina de hielo para poderla usar a la hora que se requiera sin tener que ir a la recepción o restaurante a solicitarla, él área de fumar esta muy lejos de la alberca y habitaciones prácticamente hasta el rincón de las áreas verdes, NO ENTIENDO porque está TAN LEJOS si es un área al aire libre, la atención fue EXCELENTE por parte de todo el personal, los jardines impecables FELICIDADES, GRACIAS

Mucho por mejorar, la tv sin señal, mucho ruido al exterior de la habitación, servicio lento y desinformado, aceptable en términos generales, el lugar es bueno pero debe mejorar incluso las habitaciones requieren una renovada.