Visito Mascota frecuentemente y llegué a este hotel porque ya no había habitaciones donde siempre me hospedo. Sin duda es muuuuy bonito.
La habitación que me tocó era muy grande así como el baño, estaba limpia y preciosa. Fue una sorpresa no encontrar televisión en el cuarto pero no me molestó porque iba a descansar.
Me gustó muchísimo por la vista, inclusive se ve la iglesia desde la alberca. Solo algo que no me pareció fue lo oscuro que estaba a las 11 de la noche que regresé de cenar, estaría muy bien que aunque sea estuviera iluminada recepción o en la zona de la alberca porque no se podía ver nada