La playa de San Diego se encuentra a unos sesenta kilómetros al oeste de Managua. Las obras actuales en la Carretera Vieja a León y los últimos diez kilómetros de acceso (por un camino sin asfaltar en regular estado) hacen que se tarde entre una hora y una hora y media en llegar a la playa.
El arenal es muy largo, bello y completamente virgen. Suele haber las continuas olas de tamaño medio-bajo que caracterizan la costa del Pacífico nicaragüense, que invitan a la práctica del surf.
En primera línea se encuentra el Surf Lodge Los Cardones. Ya se ha comentado que la localización es inmejorable, pero otros detalles no están a la altura.
No nos alojamos allí, solamente fuimos de excursión de un día con unos amigos. Para pasar el día el coste de acceso es de 10$, consumible en el restaurante del hotel. Hay ranchos techados con sillas y mesas donde dejar las cosas. El sitio es seguro y tranquilo, ideal para relajarse.
La gran decepción de la jornada fue la calidad de la comida. La carta es bastante corta y poco variada. La pizza que solicitamos fue insípida y la pasta con queso y tomate fue la más seca que probé en mi vida.
Se debe tener en cuenta para quien quiera hospedarse allí que no hay luz eléctrica. El precio del alojamiento que comprobé en su web me pareció excesivamente caro.
Atención muy amable y cordial por parte del personal que nos atendió.