El lugar bien, nos recibió una Chava con una vibra increíble, después conocimos a la dueña que le mencionó a mi pareja que debía presentarse con los vecinos, los cuales tenían perritos y los llevaban a ese lugar desde que eran cachorros, desde ese momento no nos sentimos a gusto porque teníamos que estar agarrando a nuestros perritos ya que por ser cachorros querían andar de un lado a otro y si ladraban, o se metían al área del comedor percibimos que la dueña se molestaba.
Ya se vivió la experiencia.