Nos quedamos 4 noches en la suite presidential, el cuarto encantador con muchissimos detalles architectonicos mayas, afuera y tambien adentro, todo esta en su lugar sin superficialidad ni brillos innecesarios.
Lo hicieron con un gusto exquisito.
Las albercas afuera (la suite tiene una prividada) estan hermosas con la vista a un lagito donde en el atardecer llegan muchos parajos...
El servicio impecable, rafael, el dueño cuida absolutamente todo y esta en todas partes.
Es italiano asi que la pasta fresca es perfecta, los productos que utilisan frescos y de muy buena calidad.
Este lugar es un milagro por lo dificil que es operar por alla un establecimiento.
Gustavo el maitre d hotel muy simpatico y atento tambien.
Volveremos.