Este lugar es increible. Hermoso arquitectonicamente y en lugar precioso. Los maestros que te atienden no solo todo el dia a disposicion de apoyar tu crecimiento sino que ademas preparan la comida, limpian, hacen las camas, enseñan a meditar y a sentir las emociones de manera saludable, son increibles! Super generosos y enfocados en su corazon. El precio es super justo, hasta diria barato. Mas alla de la personalidad de la fundadora, Isha Judd, que es un ser humano y como todo humano tiene sus diferentes facetas, es un lugar que me ha ayudad a crecer enormemente. Muchas gracias!