Llegamos por cuarta vez a Palladium, en esta oportunidad comenzamos en Kantenah y escribo comenzamos porque terminamos en White S.
Lamentablemente la llegada no fue de las mejores, en nuestro check in el joven fue muy insistente en tratar de vender Family Selection y se tornó desagradable su actuar, esperaba un recibimiento más cordial en nuestra cuarta visita, luego acompañamos a nuestros abuelos a realizar su check in en Colonial donde todo fue distinto con un joven dando una bienvenida y excelente disposición para buscar una villa del agrado de los abuelos.
Kantenah y su remodelación quedó increíble, la habitación tuvo un cambio notable, el problema surgió cuando ocurrió un fallo generalizado en el aire acondicionado que nos hizo pasar una noche para el olvido, era nuestra sexta noche de catorce en total. Al dia siguiente me acerqué a Concierge a buscar una solución siendo trasladados a White S. a una habitación más grande y muy cómoda.
Bufet La Hacienda sigue cumpliendo con sus comidas y variedad para elegir.
No deben dejar de visitar el restaurante Bahía Brasa, sus carnes son notables.
Punto alto son sus shows en teatro Colonial, bailarines/as profesionales y musica en vivo son una atracción imperdible todas las noches. Se agradecería un futuro cambio en la cartelera ya que se mantienen los mismos shows por mas de dos años cambiando solamente un poco las coreografías, aunque se disfrutan igual.
A raíz de un inconveniente se nos invitó a un entretenido taller de pintura en tela, mi hija lo disfrutó muchísimo y al dia siguiente pintaron un sombrero que quedó precioso.
En general las vacaciones fueron positivas, sólo quedó pendiente una compensación que no se pudo concretar. Espero que en nuestra próxima visita se pueda retomar ese punto.
Visiten Palladium no se arrepentirán.
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