El hotel es fantástico en cuanto a decoración, pero el buffet y las comidas son básicas y repetitivas. La piscina está muy bien, pero la mitad de ella es ocupada por una colchoneta enorme a la cual si quieres subir tienes que pagar 20€/hora. En cuanto al servicio de la gente es pésimo, NO QUEIREN AL TURISTA ESPAÑOL. Nos robaron en la habitación 450€ y absolutamente nadie hizo nada, en un hotel 5* roban dinero en las habitaciones y no existe un protocolo ni seguro para reembolsartelo.