En febrero fuimos a celebrar el cumpleaños de un compañero de trabajo y desde que llegamos nos recibieron con calidez, nos obsequiaron una copa de vino, nos acomodaron y además, no cobraron el consumo del cumpleañero, todo esto como parte de sus promociones. Tienen a una persona encargada de comprobar que todo esté bien con los clientes, lo que me pareció excelente, los meseros muy atentos...en fin, el personal muy bien para atención al público. Comento esto, porque debería ser una tónica en todos los lugares de servicio, pero a veces no pasa así, por lo que me parece justo destacarlo y precisamente pienso que eso es parte de lo que genera la demanda que tiene el lugar... La sazón es buena, hay correspondencia entre los precios, la cantidad y la calidad de la comida. Mis ravioles con pollo ...muy muy sabrosos, igual opinión tuvo el resto del grupo con su respectivos platos. Lo recomiendo.