El staff muy amable nos ubicó inmediatamente y nos mostró el menú así como la especialidad del día. Nos explicaron sobre la filosofía del restaurante al ser productos orgánicos que apoyan productores locales, los cocteles son de gran calidad, nada comercial, sólo para paladares conocedores y la Mixología es toda una experiencia de sabores.
Mientras tomábamos el aperitivo nos sirvieron un aperó humus artesanal con pan horneado.
El café gourmet es una delicatessen, donde se vive la experiencia del mejor café de Costa Rica, ya que compran de las mejores reservas a los productores de altura de Costa Rica, muchos de ellos ganadores de premios internacionales de la Taza de Excelencia.
Es un hermoso lugar, con un ambiente muy amigable, atendido por una familia pionera de la zona que ha desarrollado un exquisito menú y una experiencia para el paladar especializado tanto local e internacional.
Sibaritas por el mundo se lo recomienda!