Es un pequeño espacio pero con todas las comodidades de nuestro hogar, me encanto la ubicacion frente al mar, despertaba con el sonido de las olas, a pocos pasos un relajante espacio para leer o simplemente ver el horizonte en unas hermosas sillas y hamacas, y lo que mas me ha complacido fue que me permitieran llevar a mi hermosa y consentida perra (una golden retrieve). La habitacion principal perfecta, buen AC, TV y confortable cama, extremadamente limpio, sabanas y paños limpios y el baño con buena presion de agua caliente y fria.
Lejos del bullicio del pueblo pero a diez minutos caminando sobre la playa, no podia pedir mas, unos dias podiamos cocinar en la cabina y otros saliamos al pueblo a departir en diferentes restaurantes.
Agradezco a nuestra anfitriona la señora Phyllis, quien siempre estuvo pendiente de nuestra comodidad y seguridad.
Espero volver pronto.