El hotel está en una excelente ubicación, al frente tiene un supermercado, está a 3 minutos caminando de la playa, cerca de restoranes, otros supermercados, farmacias y bancos.
Estuvimos en un mini departamento que contaba con una cocina equipada, terraza con vista a la piscina y al resto del hotel, baño, dormitorio perfecto, aire acondicionado y limpieza diaria.
Todos los días sirven un desayuno distinto y exquisito, que se adapta a las condiciones de cada huesped, en mi caso gluten free y apto para alergias. Las chicas que lo preparan son super amables, cordiales y comprensivas.
Cuentan con toallas y sombrilla para el uso en piscina y playa.
Uno se siente como en casa, el ambiente es familiar y tranquilo, el hotel es muy lindo, se destaca la decoración, cada lugar tiene su detalle.
Recomendadísimo.
Muchas gracias Ten North. Un 10.