Mi novio y yo decidimos tener una cita romántica en Fuengirola, y queríamos salir a comer pero no lo teníamos nada seguro. Nos llamó la atención este restaurante que tenía buena pinta, aunque no la conocíamos. Terminó siendo una gran elección, porque tanto la comida, la presentación de esta, el precio, la amabilidad de los camareros y el ambiente fue increíble. Se aseguraron de que no nos faltase de nada y tuviésemos una cita romántica de calidad, y de verdad, solo podemos contar maravillas de este sitio. Queremos agradecer especialmente al camarero que nos estuvo atendiendo durante toda la velada, Omar, que fue un encanto y muy profesional de principio a fin y nos hizo sentirnos como en casa. Solamente por la comida nos hubiesemos ido contentos, pero la presencia de Omar añadió mucho a nuestra experiencia. Ni falta hace decir que vamos a repetir muy pronto!