Llegar no es tan sencillo, son calles estrechas y hay que buscar estacionamiento, pero el lugar vale la pena, el menú es variado, tienen uno de desayunos y otro por la tarde. Probé las chalupas y el pulpo, ambos muy buenos, ocurrió un problema de confusión en la salsa de mi platillo, le pusieron un picante que no correspondía sin embargo buscaron enmendar el error y nos regalaron un par de postres.

Volvería definitivamente, es en un patio, con temporada de calor seguramente será menos amigable la estancia e incluso hay algo de mosquitos por los árboles del lugar.

Las porciones son normales el costo-beneficio es muy bueno.

Ese postre de plátano con queso es delicioso!

Es un restaurante tan bonito que uno siempre tiene ganas de regresar. El servicio es maravilloso y puedes realizar eventos privados para tus fiestas.

Hermoso lugar con comida deliciosa y atención personalizada.
Desayunos deliciosos
Comidas con platillos innovadores
Vino y cervezas artesanales.