La comida no es buena. No es que sea horrible, pero no tiene mayor relevancia. El lugar no está limpio, hay mucho desorden.

Me encantó disfrutar un día de descanso en este lugar. Desayuné delicioso y pasaron delfines… wow! El lugar es muy tranquilo y se encuentra en excelentes condiciones.

En la puesta de sol, caminé hacia la laguna y me dieron oportunidad de regresar para pedir un taxi desde ahí, así que me sentí muy segura.

El restaurant está a orillas del mar, es muy limpio y cuenta con alberca.

El servicio es muy bueno y la comida de excelente calidad. Los platillos son vistosos y se sirven con abundancia.