Muy lindo y cómodo. Con su propio bosque y jardines dentro del terreno. Atendido de forma excelente por sus dueños y el personal que también es muy amable y cordial. Uno de los días de estadía teníamos un tour temprano, Isabel, la dueña, nos preparó un desayuno para llevar con un termo con café calentito y un kuchen muy rico que disfrutamos en una parada en el lago Las Torres.
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El lugar es muy acogedor los dueños te hacen sentir en casa y es lo que nosotros buscamos para nuestros clientes y la comida muy buena la verdad es cuando pagas algo y quedas muy satisfecho lo recomiendo una buena opción en la carretera austral
Los dueños son muy amables, siempre pendiente en responder y dar un mejor servicio. El hotel es exquisito muy hogareño estilo sureño, el restaurante tiene buenas preparaciones. Patagonia se encargó de armarnos la tour que queríamos de acuerdo a nuestros tiempos. Muy agradecida por su amabilidad.
Muy cómodo el hotel, es pequeño, de pocas habitaciones, pero muy cómodas, el entorno es muy lindo, pero lejos lo mejor que tienen es la cocina, todo muy bien preparado, muy, pero muy rico, una carta variada y pese a eso los tiempos de espera de los platos son cortos. No pueden quedarse en ese hotel sin probar algo de la carta, sería un grave error.
Lo único que le podría criticar es que la aislación acústica no es tan buena y, por lo tanto, se oye algo de la televisión de la habitación contigua.
De vacaciones en la región de Aysén, nos alojamos en una habitación del segundo piso del hotel, muy limpia, cómoda, temperada, con todo lo necesario para descansar después de un día completo de tour por las maravillas de la Patagonia.
Cuenta con un restaurant con excelentes platos, entre los que probamos la deliciosa Cojinova Gala y el Creme Brulee de Mate como postre. No puedo dejar de destacar la completa atención de Gabriel.
Ubicado a unos 5 a 10 minutos a pie del centro de Puerto Aysén, en un entorno silencioso para un completo relajo, tanto de día como de noche.
Mi hija de 20 años y yo, somos amantes de la Patagonia y este verano escogimos puerto Aysen.
Como nos gusta "andar a nuestro ritmo" no queriamos un paquete turístico cerrado, así fue que llegamos a este precioso y exquisito hotel, que entrega toda la tranquilidad que necesitas para reponer fuerzas.
Desde el primer contacto hasta el fin de nuestra estadía, cuidaron de cada uno de los detalles y además reservaron los tour que nosotras queríamos y, para nuestra sorpresa incluso coordinaron el transporte hacia puerto chacabuco.
Excelente el equipo, desde la dueña ( preocupada por nuestro desayuno el día que nos retiramos a las 6:30) hasta el personal de servicio.
Ustedes son representantes de la magia del Sur.
