Tristemente decepcionados del nivel de “servicio” de determinados integrantes del personal del hotel. Llegas, nadie te recibe el coche, el personal no te apoya con las maletas, ni te indica en dónde es tu habitación, hay que estar buscando entre los diferentes espacios para encontrarla, misma situación al checkout
Los pasillos huelen a esencias no tan agradables, las habitaciones bien, cómodas y espaciosas.
Es preocupante la limpieza de los pasillos, en los 4 días que estuve, no hubo uno solo en el que no encontrará platos y tazas tiradas en el piso.
La alberca bien aparentemente aunque una vez que te metes cuenta ya con el piso sumamente roto y es peligroso para los niños que pueden cortarse
No había quien proporcionara toallas por lo que uno las toma y devuelve esperando que no hubiera problema
El restaurante en el desayuno es bueno, el personal es accesible, la señora que prepara huevos es sumamente amable y los alimentos deliciosos.
Considero que en grupo Brisas deberían preocuparse por equiparar el nivel de servicio y atención que brindan en todos sus hoteles porque después de haber visitado Nizuc y elegir Jurica por pensar que eran de la misma línea, resulta decepcionante percatarse que están a años luz de atención al cliente.