El restaurante del hotel puede disfrutarse aunque no se esté hospedado en el. Se encuentra frente al zócalo de la ciudad de Tlaxcala con fácil acceso. Tiene una lista de platillos para la mayoría de los gustos incluyendo los de temporada como los chiles en nogada. El personal muy amable, aparte del servicio de la comida dan buenas recomendaciones para disfrutar la ciudad y alrededores, museos, templos, etc.
El platillo que solicité me supo delicioso, salmón a la costra, tres chiles. Si visitas del extranjero y no estás acostumbrado a la comida picante te recomiendo elejir otro platillo.