Es un hotel muy limpio , con personal muy amable. Está ubicado en pleno corazón de Tlaxcala lo que te permite conocer a pie muchas de las principales atracciones de esta pequeña ciudad . El desayuno es delicioso. En uno de los cuartos no funcionaba el calefactor pero no fue un problema ya que había cobijas suficientes . Muy bueno el detalle de ofrecer café de olla al llegar, ayuda a mitigar el frío.