A pesar de ser un hotel antiguo con espacios pequeños en las habitaciones sencillas es muy comoda, limpio, centrico, de facil acceso, el personal muy muy amable y atentos, lo unico es que alguna habitaciones cuentan con clima central entonces no ahí manera de que si te da frio le subas la temperatura o si tienes calor bajarle, y la cobija o edredon por asi llamarle es muy delgadita y de plano pues no quita el frio, en el quinto piso si tiene su control cada habitacion pero se tarda mucho en enfriar... lo malo es q cuando esta abierto el bar el fin de semana huele demasiado a cigarro ya que el bar esta pegado a la recepcion y es lo que te recibe al entrar, tienen musica en vivo, promos de bebidas, horarios y demas al entrar checas todo, otra cosa que si da miedo es el elevador, se jalonea mucho, eso si lo deberian de checar, el desayuno sencillo, economico y rico... de ahí en fuera todo practicamente es bueno!

Hotel antiguo pero limpio, habitaciones cómodas y con los servicios básicos, excelentes precios. Si el ruido te afecta pide lejos de la calle. Queda muy cerca del puente internacional y el restaurant del frente es riquísimo.

Un hotel viejo, limpio, sencillo, personal atento y amable, la comida tiene un muy buen sazón, los desayunos están muy ricos y variados, las comidas no tanto, pero se compensa con el sazón. Tiene una ubicación excelente, en el corazón de la ciudad.