Este hotel es pequeño, pero esta muy completo, cuenta con: alberca, asadores, el cuarto que me dieron No. 12, estaba amplio, con tele, clima, agua caliente. El personal muy atento, en especial Salma y la Sra. Juany
Po el tamaño del hotel te sientes como si estuvieras en tu casa, casi no había gente, así que casi todo el hotel era para nosotros. También hay bicicletas, esta muy bonito el hotel.
Otra cosa que me gustó fue que esta en el pueblo, a media cuadra llegas al super, y puedes ir caminando al centro. Compramos para hacer de cenar y ahi en el hotel nos permitieron usar la cocina para calentar y preparar algo pequeño para cenar.
Lo que no me gustó es que es un poco caro y el desayuno es solo café y pan. Les hace falta incluir un mejor desayuno (de perdida leche fresca y cereales)
La verdad me gustó mucho el pequeño hotel. Lo recomiendo y claro que regresaría.