Pasamos allí el sábado por la noche. La habitación estaba muy bien, ¡pero se oía al hombre de la habitación de al lado lo bastante claramente como para distinguir que tenía acento australiano!
A pesar de las críticas del año pasado, que dicen que el hotel necesita urgentemente que lo redecoren, está claro que no se han dado cuenta. La zona de la entrada por el ascensor y la de los baños de la planta baja están realmente mal. Necesitan urgentemente que las pinten y les pongan nuevo el papel de la pared.
La sala del desayuno es bastante pésima, pero el desayuno tiene cosas calientes y está bien. La bienvenida no fue positiva, pero por lo demás el personal es simpático y servicial.