Creo que la palabra EXCEPCIONAL se queda corta. No sé ni por dónde empezar. Fui con mi pareja y mi niño (2 años) y fue poner un pie en la recepción y saber que todo iba a ir genial. Es imposible agradecer a todos el buen trato, el cariño y la amabilidad con la que te tratan. Siempre con una sonrisa en la boca, una buena palabra...
La habitación muy limpia. Teníamos un estudio con una pequeña cocina, nevera, microondas y vajilla y cubertería necesarias. En el baño hay secador y también champú, gel... Nos hicieron upgrade y pudimos disfrutar de vistas a la piscina.
El buen hacer de la cocina - y la preocupación porque todo estuviera perfecto - consiguen que empieces el día con una sonrisa. Un comedor amplio y luminoso repleto de una comida excelente, una grandísima variedad de comida y con una calidad fantástica. Fruta fresca recién cortada, variedades de pan, tortillas y revueltos hechos en el momento, bollería , chocolate... sin faltar los huevos, bacon, embutidos... Para cenar, todavía hay más variedad, todo recién hecho y con noches temáticas que hacen todavía más interesantes cada uno de los platos.
Tienen mini - club. Donde los niños se lo pasan genial entre la piscina de bolas, los columpios, colchonetas, el ajedrez, pistas de baloncesto, mini golf... Hay diversión para pequeños y no tan pequeños. Además, sala de fitness con varias máquinas, cinta de correr, elíptica... Manicura, pedicura, peluquería y masajes. Actividades deportivas para niños y mayores. Y el spa, muy completo y con horario reservado para solo adultos. Hay dos piscinas fuera. Una para bebés (de un palmo de altura) y otra para niños grandes donde también hacen actividades (genial la fiesta de la espuma y la pista deslizante). Cine, bar y cafetería para completar la oferta.
Y para terminar el día, la mini disco, donde la incansable Steffi no para ni un segundo animando a todos los peques a bailar. Después por la noche continua la fiesta, cada día algo diferente, porque aquí es imposible aburrirse.
Tengo que hacer mención especial a Claudia. Una chica encantadora que trata con muchísimo amor a todos los niños. Rodrigo te manda un abrazo enorme y yo un beso muy gordo. Gracias por tu cariño. "Mamá, quiero volver a casa de Beny". Y yo, también.
Gracias por unas vacaciones de oro, equipazo.