Primero lo bueno porque me gusta ser bien imparcial en las opiniones: la cama comfortable, la habitación estaba bien, la piscina también, el personal fue amable en su mayoría y nos solucionó problemas (por ejemplo al llegar nos dieron una habitación diminuta con nada más que dos camas individuales, lo cual no fue lo reservado, pero lo expresamos y nos cambiaron de cuarto a uno con cama matrimonial), el desayuno rico. El lugar es pintoresco, como corresponde a la bella Granada. Sin embargo contamos con la suerte de llegar y el lugar estaba lleno con una excursión, creo que éramos los únicos que no éramos parte del grupo. No se si será la primera vez que atienden un grupo tan grande a la vez pero colapsaban un poco, sobre todo en el desayuno (se acababa el café, los huevos, etc.) Y había que esperar para volver a contar con las cosas. Los dos días que desayunamos nos sucedió parecido, casi no nos sirven la siguiente mañana porque el grupo se iba y todo el mundo estaba ocupado. En fin, esto fue algo muy circunstancial, en general la relación precio-calidad es muy buena.