El Hotel está muy bién situado en una zona muy tranquila y protegida. Llegamos con coche y desde el primer momento todo el staff del hotel nos trato de una forma excelente!
La comida del restaurant muy buena al igual que el servicio.
El único inconveniente era el tema de las iguanas. Por la mañana había iguanas por todas partes, y si no te gustan mucho estos animales pueden llegar a molestar, ya que los puedes tener a tocar de tu piscina o jakuzzi. Nosotros teníamos una de muy grande controlando todo el día...y claro...cuando queríamos disfrutar del jakuzzi teníamos que mirar de tenerlo todo bién cerrado para que no se colase dentro de la habitación.
Todo lo otro, excelente! Volveremos a Punta Islita! Y recomendación...llevad la VISA bién cargada...que los precios no son nada baratos!
Una recomendación: masaje de chocolate en la casa SPA. Excelente!