Estuvimos de luna de miel 5 días en este hotel. Habíamos reservado una habitación con vista a la ciudad y pedimos un piso alto. No es nuestra primera vez en NY por lo que ya sabiamos al barrio al que estabamos yendo que para nosotros es nuestro preferido.
Nuestro vuelo llegó muy temprano, y por suerte nuestra habitación ya estaba lista. Entramos y no podíamos creer la vista que teníamos desde la habitación. Quedamos sin palabras. La habitación de lujo y amplia. Todos los servicios del hotel impecables y todo MUY DIVERTIDO!
El bar de la terraza tiene unas vistas increibles 360°.
¡¡¡¡¡¡No vemos la hora de volver!!!!!!