El lugar es muy bonito y la comida deliciosa, la crema de frijol ayocote simplemente es deliciosa, también la pechuga de pollo orgánica con vegetales cocinados de manera simple pero muy ricos, lo que se lleva las palmas es la hamburguesa de sirloin con rib eye, el sabor de la carne es espectacular!!!
Afortunadamente no tuvimos problema para tener una mesa en la terraza, pues llegamos sin reserva y había leído que era complicado cuando hay mucha gente.
El servicio del staff y de los meseros fue muy bueno, son atentos y amables, te hacen sentir como en casa.