Entramos con mis amigos buscando un buen desayuno y nos llevamos un hermoso recuerdo de nuestro viaje, tanto, que pese a nuestra intención de siempre ir probando lugares distintos en las ciudades que visitamos, el segundo día que estuvimos en la ciudad, desayunamos nuevamente ahí, teniendo una nueva grata experiencia.
La atención muy dedicada y amable, todo el personal que nos atendió fue de maravilla, ojalá siempre nos atendieran así en todos lados.
Buena comida, probé jugos, chocolate caliente, un cangrejo relleno con chocolate, que tenía buena cantidad de relleno y caliente estaba muy sabroso.
Sin dudas, cuando vaya nuevamente a Monteverde (Santa Elena es el lugar más cercano), tomaré desayuno en esta delicia de panadería.
¿Es el propietario o administrador de este establecimiento? Solicite su perfil gratis para responder las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.