Mucha comida casera. Como antiguamente la dueña cocina como en su pasa y prepara fantásticos pasteles y paellas.
Está situado justo al lado de la playa y dispone de un jardín con mesas a la sobra o al sol.
Al lado hay un parking.

Hemos comido varias veces en este restaurante a lo largo de los años y no defrauda. Ubicación excelente enfrente de la Playa, local amplio y servicio muy profesional.
Cuentan con una amplia variedad de pescados y mariscos y un montón de entrantes para compartir. En esta ocasión tomamos las almejas marinera y las albóndigas de jurel...ambos platos buenísimos y de postre la tarta de cuajada, exquisita. Carta de vinos amplía con varias referencias en media botella, que es de agradecer.

Aunque el menú cuesta 25 € se paga, si no con gusto, al menos porque los platos lo merecen. La ensalada o el arroz con almejas; o la lubina a la sal o los escalopines (quizás un poco menos de salsa se agradecería) estaban muy bien preparados. El trato correctísimo y muy agradable.

La verdad es que merece la pena por donde se encuentra ubicado y por la comida que ofrece.

Este restaurante está en el paseo marítimo, dispone de u a terraza donde puedes tomar un café o pinchar algo mirando al mar. Un sitio muy tranquilo, para descansar un ratito

Comida muy buena,trato correcto,vistas al mar,buena decoración.Fuimos a celebrar un aniversario y todos salimos muy contentos.Volveremis fijo.