la esposa es divina, pero el marido y jefe del lugar es un avaro miserable que mide cuantas tazas de cafe te tomàs y cuantas masitas comès. El primer dia habia fruta y al dia siguiente nos la sacò. Ademàs es un racista sudafricano (no son holandeses, son boers de sudafrica). Los hijos son una version mejorada. uno de ellos es el màs atento. Si sos de buen desayunar, olvidate, andà a otro hotel. estuve con mi esposa en enero de 2013 durante 13 dias y lo digo todo por experiencia personal. En ese momento no tenian cable ni servicio de internet.

Es una pareja no local (algunos dicen que son holandeses, otros que son sudafricanos). Hablan un ingles muy acentuado y español muy torpe, pero se hacen entender.
Es una casa grande donde alquilan habitaciones, muy comodas y limpias. Atienden al huesped hasta por demas, estan en todos los detalles, pero lo mejor es el desayuno. Increible desayuno que consta de panes varios y cositas dulces que ellos mismos preparan.