Bien ubicado en una parte más tranquila de Castro. Habitación completa con todo lo necesario. Personal en recepción muy amable.
Incluye botellas de agua de cortesía y tiene hervidor para hacer café/te (en nuestro caso solo un sobre de café para 2 personas).
El hotel está algo anticuado, tanto estética como funcionalmente. A tener en cuenta que como en todo Castro solo hay zona azul en los alrededores.