Apartamento luminoso, limpio y funcional. Relativamente cercano a la playa y con todo tipo de servicios en las inmediaciones. La dueña siempre atenta a cualquier necesidad.

La estancia en este apartamento han resultado ser las peores vacaciones de nuestra vida.
Teniamos alquilado del 15 al 21 de agosto y el pasado lunes 17 se cayo mi madre en el cuarto de baño rompiéndose la tibia y el peroné del pie derecho a la altura del tobillo. Se había duchado mi mujer y a continuación se ducho mi madre cayéndose al salir.
La dueña no tiene ningún tipo de seguro de accidentes. Ademas le echa la culpa a mi pobre madre, que con 72 años bastante tiene, por no haber cambiado la toalla que estaba en el suelo antes de entrar a ducharse.
Yo, que fui con mi madre al Hospital de Laredo en la ambulancia, tuve que pagar un taxi para poder volver a Noja. Como no hay seguro, pues no cubre nada.
Hoy dia 19 hemos adelantado el regreso a Madrid y la dueña dice que nos vamos porque queremos y que no tiene obligación de devolvernos el dinero que corresponde a los dias que nos faltan porque mi madre ya está ingresada en el Hospital y nosotros podemos seguir las vacaciones perfectamente. Que falta de sensibilidad hacia las personas.
Los que leais esto poneros en mi lugar y ojalá que alguien con su opinión me hubiera avisado para no haber ido nunca a este sitio.
La dueña tiene otros apartamentos en Isla "Los apartamentos de Dolfi", tampoco se los recomiendo a nadie por los mismos motivos.