en esta epoca de contingencia es el lugar perfecto para escaparse, ya que al ser pocas habitaciones casi no te encuentras gente, sus instalaciones son muy limpias, los alimentos te los pueden servir en el restaurante o en cualquier palapa de las que tienen en el hotel, cuentan con camastros en la playa y servicio de bebidas.

Los cuartos son lindos en cuanto a decoración, pero el servicio en recepción es muy malo; grosero, con actitud defensiva todo el tiempo.

La regadera de la habitación estaba toda tapada, salía muy poca agua.

El servicio en el restaurante malo. Las porciones no estaban de acuerdo al precio. Y no te permiten meter ningún alimento ni bebida a las instalaciones aún cuando su restaurante no es 24hrs.

Cierran el acceso a la playa a cierta hora alegando que es "privada" y ni siquiera de dan a la tarea de mantenerla.

Teníamos reservadas 4 noches y solo nos quedamos 1 y cambiamos de hotel.

El hotel en cuanto instalaciones es bonito. Lo que termina y mata está impresión es los servicios.
1. Por precio que pagas no incluye desayuno.
2. Porción de alimentos en cuanto a precio es pobre. Comparando con otros restaurantes de la zona.
3. No dejan ingresar alimentos al hotel. Por lo que estaría bien si los alimentos de su restaurante fueran buenos y si pudieras ordenar algo después de las 8 de la noche. Pasando esa hora te tienes que quedar con hambre.
4. Las personas que se encuentran en recepción no saben los movimientos adecuados para transacciones de pago. Aparte de hablarte en un tono muy despectivo.