Desde luego, los amantes de la cerveza conocen Múnich como el epicentro del Oktoberfest, una celebración de la cerveza y la cultura bávara. Hofbrauhaus, la cervecería más icónica de Múnich, ofrece cervezas desde 1589, y la escena de tabernas bávaras de la ciudad no tiene comparación. Pero si pretendes conocer Múnich en profundidad, hay mucho para ver, hacer y comer. Puedes deleitarte con comida alemana clásica, como codillos de cerdo, pretzels y albóndigas SemmelKnodel, en cualquier momento. Luego están las vistas: camina (o patina sobre hielo) por el Olympiapark o visita el Jardín Inglés de Múnich, uno de los parques urbanos más grandes del mundo. Recorre el paseo Marienplatz y disfruta de la vista del Rathaus-Glockenspiel, un reloj gigante que recrea momentos históricos. Y, en diciembre, la ciudad cobra vida con luces centelleantes y mercados navideños. Si quieres más recomendaciones, échales un vistazo a las que tenemos para ofrecerte a continuación.